Este sábado se vivió una doble caída en el Centro Nacional de Atletismo de Budapest durante la celebración de los Mundiales de Atletismo. La de la velocista neerlandesa Femke Bol, que tuvo lugar a escasos centímetros de línea de meta, y la de compatriota, la fondista Sifan Hassan, cuando faltaban menos de 50 metros para el final de su prueba.
Femke Bol sufrió este percance en el final de la prueba de 4x400 metros relevos mixtos. La selección de los tulipanes estaba luchando por el oro contra Estados unidos, que consiguió el primer récord del mundo de este Mundial.
La atleta lanzó el testigo y eso provocó la descalificación directa de la selección centroeuropea, y para colmo, su rostro acabó golpeado de manera brusca contra el tartán.
Por otro lado, Sifan Hassan, compatriota de la vallista, sufrió un dramático final en la prueba reina de fondo en pista. Competía en los 10.000 metros después de haberse clasificado a la semifinal de 1.500 metros en la sesión matinal. En la recta final tuvo un choque con Tsegay, que no cedía en la llegada a meta frente a la de Países Bajos, y al final la etíope acabó consiguiendo el oro.
Un día horrible para la selección neerlandesa que podía haber logrado dos medallas de oro y, al final, no consiguió ninguna. Estas dos caídas, que han ocurrido en el mismo día y en un margen de menos de una hora, ensombrecen la cita mundialista.
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